Según relató la víctima en su denuncia, los asaltantes lo maniataron con un cable y lo golpearon en la cabeza, exigiéndole de manera violenta la entrega de una importante suma de dinero que, según ellos, provenía de la reciente venta de animales. Piceda aclaró que ese dinero aún no lo había cobrado.
A pesar de las lesiones sufridas, el anciano permaneció atado por un período de tiempo hasta que logró liberarse por sus propios medios y pedir ayuda.
Elementos sustraídosTras el violento asalto, Piceda constató la faltante de los siguientes elementos:
Dos teléfonos celulares: uno nuevo en su caja y un antiguo modelo Nokia, utilizado únicamente para llamadas y mensajes. Dos escopetas: una calibre 28, de dos caños y una calibre 16, de un solo caño. Ambas armas con culata de madera.
Las autoridades policiales trabajan en la investigación del caso para identificar y dar con los responsables de este grave hecho que generó conmoción en la comunidad.